Todos los días empiezo de nuevo,
todos y cada uno de ellos.
Con energías renovadas
veo las cosas fáciles de conseguir,
a mi alcance.
Sin embargo,
todos los días al acostarme
me doy cuenta de que fracasé en el intento,
que les falle,
que me falle,
que cada vez me hundo más y más hondo.
Quizás no es para tanto,
quizás acerté en algún momento,
quizás puedo hacerlo bien.
Sólo un quizás
frente a la certeza del fracaso diario.
frente a la certeza del fracaso diario.
Día tras día.
quizás algún día,
quizás...
el éxito y el fracaso son dos impostores. Borges.
ResponderEliminarNo te afanes en seguir el ritmo acompasado de los otros...cada uno debe tener su propia medida del tiempo,estar contigo o no estar contigo, esa era la medida de mi tiempo...
Pero esto ya lo sabes...
Aunque no siempre le devuelvas a tu corazón
la satisfación de vivir acorde
a un mundo salvaje, repudiando
todo pensamiento sistemático,
porque todo sistema conduce
necesariamente
a la trampa...