viernes, 3 de diciembre de 2010

Anatomia de una sombra




Las adulaciones encogen mis dedos,
y, desafortunadamente, no suelen acertar...
Apenas soy una sombra
que deambula por el mundo
arrastrando los pies,
para que no se aprecie la huella,
para que no se sepa de quién es...

Soy... como...

Ese crucigrama sin acabar,
esa historia sin final,
ese error que convertía el problema
en un ecuación sin solución...

El pentágrama sin música,
o más bien, el pentágrama
de una canción mil veces repetida en el tiempo.

No puedo olvidar equivocarme
al menos una vez al día.
No puedo evitar dejar de ser yo,
o quizás simplemente imaginarme
que no soy como veo que soy,
autoengañarme cada tres minutos,
agachando la historia de mi vida en un trama sin final.

Ni frascos ni poemas,
ni príncipe que luche contra el dragón,
ni enigma que resolver...

Mediocridad abundante,
apenas un atisbo
de querer llegar a dónde nunca me dejaré llegar.

Estoy cansado,
pensé que quizás hoy dormiría antes de la madrugada.
Cerraré los ojos y olvidaré lo aquí escrito.
Pronto volveré a escribir,
para terminar de olvidarlas....

1 comentario:

  1. Eso es lo verdaderamente maravilloso de ti, q sin querer haces cosas increibles.

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